viernes, 8 de julio de 2011

España: Corrupción en los Derechos de Autor

Nueve personas han sido detenidas en relación a una trama de corrupción en la entidad que gestiona los derechos de autor. El desvío de fondos podría superar los 26 millones de euros. Artistas de la talla de Alejandro Sanz, Andrés Calamaro y Joaquín Sabina se han posicionado públicamente al respecto. Un problema más para el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.



El mes de Julio comenzó con un terremoto en el mundo de las artes españolas. El viernes día 1 agentes de la Guardia Civil, por orden de la Fiscalía Anticorrupción, procedían al registro de varias sedes de la SGAE (Sociedad General de Autores y Editores) y a la detención de 9 personas, entre ellas el Presidente de la sociedad Eduardo “Teddy” Bautista. Se les acusa de apropiación indebida de fondos, administración fraudulenta y delito societario. Así se daba a conocer la trama corrupta articulada alrededor de la SGAE, sociedad dedicada a la gestión de los derechos de autor, que agrupa a casi 100.000 artistas y empresarios de la cultura española.

Más de 26 millones de euros podrían haber sido desviados de la sociedad hacia manos particulares, en una trama cuyo cerebro sería José Luis Rodríguez Neri, Director General de la SDAE, filial digital de la SGAE. Paralelamente, Neri construyó un entramado empresarial que primero dirigió personalmente y posteriormente, una vez comenzada la actividad delictiva, cedería a amigos y familiares para controlarla a través de ellos. Según el auto del juez Pablo Ruz, la empresa Microgénesis sería “la cúspide de la trama empresarial parasitaria” que a su vez era “autorizada, consentida y también impulsada” por el Presidente de la SGAE “Teddy” Bautista.

La SGAE, a través de su filial SDAE, se convirtió en el único cliente de Microgénesis. Esta última facturaba a las primeras proyectos a precios considerablemente superiores a los de mercado. Otro buen número de empresas completaban la trama facturando servicios nunca realizados a la SGAE o siendo falsamente subcontratadas por Microgénesis. La única utilidad de estas empresas para los implicados era la de “fijarse una retribución y pagar gastos personales” con apariencia de legalidad. Incluso 2 millones de euros, procedentes de subvenciones y créditos que la SGAE recibió del Ministerio de Industria, fueron desviados hacia Microgénesis.

La operación policial se llevó a cabo justo un día después de que “Teddy” Bautista fuera reelegido presidente de la sociedad, en un proceso electoral en el que la Fiscalía Anticorrupción también ve indicios de delito. Según el auto, el cabecilla de la trama, Rodríguez Neri, desde su puesto como miembro de la Comisión Electoral, habría beneficiado a la candidatura de Bautista y perjudicado a la opositora.

SABINA, CALAMARO Y SANZ SE POSICIONAN

Rápidamente comenzaron a oírse las voces de los artistas, en su mayoría apoyando y confiando en la inocencia de “Teddy” Bautista, quien fuera líder de Los Canarios, exitosa banda de rock progresivo de finales de los años 60. Los apoyos más significativos llegaron al día siguiente de las detenciones, durante el recital que Joaquín Sabina y Andrés Calamaro celebraron en la Sierra de Gredos. Ante el público allí congregado, el músico argentino se atrevió con un “estoy con Teddy” que fue contestado con silbidos de desaprobación.

Más lejos fue en su cuenta de Twitter, donde escribió “la operación SGAE y el 23-F son la misma cosa”, comparando las detenciones del primer día de Julio con el intento de golpe de Estado en España de 1981. Sus seguidores le respondieron duramente, a lo que Calamaro no dudó en contestar, entrando en una acalorada discusión vía Twitter.

Por su parte, Joaquín Sabina fue más comedido y señaló que “hay que respetar la presunción de inocencia” de los detenidos. Y contundente fue Alejandro Sanz quien, también vía Twitter, llamó “cortitos, rabiosos y oportunistas” a los que criticaban a la SGAE, señalando que “los autores somos las víctimas”.

En otro sentido se manifestó el cantante Ramoncín, quien anunció que de demostrarse ciertas las acusaciones se personaría en el proceso como acusación particular. Es llamativa esta postura ya que durante años él fue la figura pública que con más vehemencia luchó contra la piratería, defendiendo los postulados de la SGAE. Precisamente por ese pasado también añadió “que a nadie se le ocurra apuntarme con el dedo por todo lo que está pasando con la SGAE, tomaré medidas legales contra el primero que lo haga”.

LA SGAE EN EL OJO DEL HURACÁN

Hace años que la SGAE es objeto de polémica. Su fervorosa lucha contra la piratería ha acabado por convertirla en objeto de las iras de gran parte de la comunidad de internautas. Especialmente por dos causas: el canon digital y las descargas ilegales.

El canon digital es una tasa que anteriormente se aplicaba sobre los medios de grabación, a modo de compensación por los derechos de autor afectados y cuya recaudación realiza la propia SGAE. Pero desde 2003 este canon pasa a aplicarse también a los soportes de CD y DVD vírgenes, lo que generó multitud de protestas. Las campañas contra el canon digital argumentan que este obliga al consumidor a compensar económicamente, con carácter previo, por un delito que supuestamente va a cometer, conculcando el derecho a la presunción de inocencia.

La SGAE también ha sido muy beligerante con las descargas ilegales, que considera una ilícita explotación de los autores. Su presión sobre las autoridades para que se legislara al respecto tuvo éxito con lo que se llamó Ley Sinde, en referencia a la titular del Ministerio de Cultura que la impulsó, Ángeles González-Sinde, y que es un apartado de la Ley de Economía Sostenible. La Ley Sinde contempla la posibilidad del cierre de webs y el corte de la conexión a internet de aquellos usuarios que violen reiteradamente la propiedad intelectual.

UN PROBLEMA MÁS PARA ZAPATERO

Sin ser, ni remotamente, el mayor de sus problemas, este es uno más que se suma a los múltiples del gobierno Zapatero. Principalmente por la estrecha colaboración con la SGAE de su Ministra de Cultura, que convirtió la defensa de los derechos de autor en internet en principal bandera de su gestión, y por la falta de control del Ministerio de Industria sobre sus ayudas, que acabaron por servir para engordar la trama.

Al respecto ya se ha manifestado la portavoz del Partido Popular Soraya Sáenz de Santamaría. En su incansable labor de desgaste del gobierno y del candidato socialista a la presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha presentado una interpelación para que este, en calidad de Vicepresidente, explique ante el Congreso de los Diputados la labor del gobierno en torno al caso.

Tampoco ayuda el hecho de que gran parte de la comunidad artística, alguno de sus miembros con labores ejecutivas en la dirección de la SGAE, haya sido un claro apoyo en el ascenso a la presidencia de Zapatero en el año 2004. Incluso ahora, cuando todas las encuestas dan una amplia victoria conservadora en las elecciones de 2012, y pocos días antes de que se hiciera pública la trama, un nutrido grupo de artistas e intelectuales publicaron un manifiesto que, de hecho, es un pequeño balón de oxígeno para el PSOE. Bajo el título “Una ilusión compartida” se crítica la gestión de la crisis por parte del gobierno pero, ante el gran avance del Partido Popular en las elecciones municipales, se hace una llamada al conjunto de la izquierda para comenzar una reconstrucción en la que también participaría el PSOE. Entre los firmantes del manifiesto aparecen nombres como los de Joaquín Sabina y Víctor Manuel, este último miembro de la actual Junta Directiva de la SGAE.

En definitiva, estamos ante un nuevo escándalo de corrupción que se suma a los muchos que se han ido destapando en los últimos tiempos. Así se explica el resultado del estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas publicado ayer, según el cual el 85% de los españoles cree que la corrupción está bastante o muy extendida en su país.

No hay comentarios:

Publicar un comentario